ALBERTO
Como es costumbre tras la consecución de un logro de tamaña magnitud, queda narrar en forma de prosa lo que a uno se le viene a la cabeza. En fin este relato va por y para todos ustedes porque de alguna manera o de otra habéis intervenido en la historia de esta aventura. Quede esta crónica en los blogs correspondientes como resumen de mi experiencia en este IM2012.
En esta batalla, como bien sabréis uno no puede estar solo, en mi caso debo hacer mención de muchos nombres, pero lo haré primero de forma muy especial, a mis dos escuderos, compañeros, amigos y hermanos, José Manuel, y Pedro, ambos son únicos. El primero por la compañía en todas estas semanas de entreno, un tipo genial donde los haya, por saber estar cuando hay que estar, y al que solo le debo admiración, cariño y respeto por ser como es, su gesto de entrada en meta, para con quien le trajo a este mundo, es inenarrable. Su familia presente y ausente seguro que estarán mas que orgullosos de el.
El segundo, es mi maestro, el sabio hermano que te enseña, y del que aprendes mucho y muy bueno siempre, y del que no quieres separarte nunca. La hispánica expresión de " Ese tío tiene dos cojones" fue creada sin duda para tipos como el. En breve su libro, "Become an Ironman without training last four weeks"" será un bestbseller.
Ambos fueron héroes en Dinamarca, su gesta puede quedarse en ambos casos sin apelativos, y su amistad estará presente en mi vida para siempre.
Igualmente, quiero dar gracias al resto de amigos, compañeros de equipo, Pegasos y Thinkeros, Sr. De Pedro, ese Presi que nos tiene tan bien aconsejados, mis padres, ellos son mis auténticos Ironman y IronWoman, mi hermano, el zorro mas veloz y demás familiares que me han arropado en todo esto, durante este tiempo, y a aquellos que entre todos estos en un derroche de amistad y apoyo me han acompañado en mi periplo danés (Carlos, Helga y Helena, THX). Gracias por su puesto a mis tres cachorros por cruzar la meta de la mano de un padre feliz y orgulloso. Por ultimo en este apartado quiero agradecer a Fernando, mi socio y amigo, su incondicional apoyo todas las mañanas y tardes, sus palabras, "q tal tu entreno ayer??, o "vete ya que no llegas a entrenar" entre otras, han sido de gran ayuda.
La mención extraordinaria, se la lleva mi mujer, LAURA, sin ella, esto, al igual que el resto de mi vida, seria imposible y no tendría sentido. Solo puedo intentar esforzarme por ser igual de agradecido y generoso, como ella lo es conmigo. Su compañía y apoyo no tiene precio, y esas casi dos horas ganadas al crono, no han sido sino el fruto por las ganas por ver su cara al llegar a la meta. Si sigue así la próxima nos vamos todos a Hawaii, ;).
La verdad, siempre he sido un tipo "curioso" por aquello de querer entender el porque de las cosas, pero en este caso, la razón, por lo menos, la mía, no llega a entender el porque mas de 2000 personas se plantan en la linea de salida de un Ironman, en este caso el de Copenague.
Solo si uno atisba hasta donde puede llegar la pasión por este deporte y por el reto que supone finalizar esta prueba, concluye en adivinar o dar un sentido a todo esto.
Desde el momento que uno toma la decisión de inscribirse en esta titánica odisea, en mi caso soy reincidente, empieza a darse cuenta de todo lo que acarrea en varios aspectos, logística, agenda, preparativos, entrenos, alimentación,......., en fin muchos quebraderos de cabeza, y sacrificios individuales y colectivos, que solo con disciplina y tesón pueden solventarse, amen de un bolsillo que de forma sacrificada ve reducir su tamaño (y en los tiempos que corren)
Cualquier ser humano "racional" pensaría que si queremos hacer esto, y además pagamos, es porque estamos borrachos cuando nos inscribimos, o porque hemos perdido el juicio, es decir estamos locos.
Dado que mi raciocinio y pasional manera de entender este deporte solo alcanza a compararlo con conseguir una medalla olímpica, ganar un gran slam,.... algo que por desgracia, yo no conseguiré, o con ollar la cumbre de un ocho mil, algo relativamente a mi alcance (todo llega) pero que por desgracia se ha banalizado puesto que no todo el mundo tiene el espíritu montañero necesario para calibrarlo, solo me queda pensar que el Ironman, es un suicidio colectivo.
Digo esto porque, esos últimos 500 metros que se supone harán que termine tu penitencia, en mi caso me gustaría que esos, en concreto esos, no finalizasen nunca, el sentir la GLORIA tan cercana, el tener a tus pies una ciudad entera, el tocar con la punta de los dedos el cielo, el dar las ultimas zancadas de la mano de tus seres queridos, esas sensaciones no las cambio por nada, y no quiero que acaben nunca. Entendería por tanto que esos mas de 2000 "locos" que se ponen el mundo por montera durante esos segundos, no quisieran que terminasen esos últimos metros nunca, lo cual supondría un "suicido colectivo".
Así entiendo las lágrimas de los vencedores, no son lágrimas por llegar a la meta son lágrimas por perder la oportunidad de seguir en ese éxtasis final.
Solo aquellos que hayan recorrido esos últimos 5 hectómetros, aquellos que se hayan planteado el reto y/o lo hayan logrado, podrán entender esta incoherencia, entre nuestro instinto de supervivencia, y querer "matarnos" por seguir soñando un sueño tan fantástico como es llevar hacia el infinito ese numero imborrable en nuestras vidas, ese 226 que queremos estirar tanto tanto, que solo nos lleva a pensar en cuando y donde volveremos a querer suicidarnos.
Como en mi crónica del Extreme Man Salou 2011, este año, tras completar el Challengue Copenhagen 2012, la conclusión es la misma,
DON´T NOW WHERE, DON'T KNOW WHEN, BUT I'M SURE I'LL REPEAT.
GRACIAS A TODOS
BESOS Y ABRAZOS
JOSÉ MANUEL
LA CRONICA:
Como crónica, contaros varios momentos, el estar a las 7:50 am, embutido en el Neopreno, mirando el trozo de mar del Amaguer Beach, por el que íbamos a nadar los 3,8 km, sentir un silencio absoluto y mirar al cielo buscando una señal de animo de un verdadero Ironman y que corrió una carrera de mas de 10 años que al final pudo con sus ultimas fuerzas, por él en su honor es uno de los principales motivos que me lanzaron a esta locura, y si, diréis que estoy loco o si es que Anne Germain esta a mi lado pero quise creerme que me daba ánimos, esa fue la única vez que he llorado en todos estos meses, ni siquiera en la meta, y esas pocas lágrimas que empañaron mis gafas me daban una fuerza increíble para hacer la natación, no sufrí nada, no me agobie, me sentí cómodo y en mi sitio en todo momento, y al final 1:10, increíble nunca había hecho ese tiempo ni en mis mejores entrenos, va por ti Padre.
De tu hijo Jose, Finisher DKM Challenge Conpenhaguen 2012
LOS AGRADECIMIENTOS:
Uff No se como empezar, bueno eso si, como ya os prometí en el mail anterior y como muchos o todos sabéis ya SOY FINISHEEEEEER
Habitualmente después de estas gestas todos mandamos nuestros mail de agradecimiento y nuestra crónica, copiando a todos aquiellos que alguna vez se interesaron por que tal lo llevabas, yo ya os agradecí a muchos, antes de la carrera a todos por estar ahí día a día y por vuestro apoyo, comprensión y ánimos constantes, pero ahora mas que nunca os aseguro que esta medalla es toda vuestra que lo único que he puesto es el cuello para que me la pongan ya que cada brazada, pedalada o zancada eran vuestro recuerdo el que me llevaba casi en volandas.
No se como empezar esta crónica, pero si deciros que no me siento de Hierro ni me siento especial ni distinto a antes de la carrera, ni se me ha disparado un ego interior ni esto es una falsa modestia, ni que me sitúe en el Olimpo de los triatletas, aunque si os digo la verdad un poco de eso siempre viene genial para momentos de baja autoestima, pero no, personalmente me quedo como decía mi compañero de fatigas y el culpable de todo, Alberto y copio textual de sus mail
"Recorrer esos últimos 500 metros que se supone harán que termine tu penitencia, en mi caso me gustaría que esos, en concreto esos, no finalizasen nunca, el sentir la GLORIA tan cercana, el tener a tus pies una ciudad entera, el tocar con la punta de los dedos el cielo, el dar las ultimas zancadas de la mano de tus seres queridos, esas sensaciones no las cambio por nada, y no quiero que acaben nunca"
Ese recuerdo es mi gloria y mi premio, y os aseguro que solo por esos 500 metros merece la pena, quien hace deporte un poco serio y lo incorpora en su día a día como un estilo de vida, sabe a lo que me refiero, ese es mi recompensa personal, los otros 225 km 495 metros son todos vuestros.
LA CRONICA:
Como crónica, contaros varios momentos, el estar a las 7:50 am, embutido en el Neopreno, mirando el trozo de mar del Amaguer Beach, por el que íbamos a nadar los 3,8 km, sentir un silencio absoluto y mirar al cielo buscando una señal de animo de un verdadero Ironman y que corrió una carrera de mas de 10 años que al final pudo con sus ultimas fuerzas, por él en su honor es uno de los principales motivos que me lanzaron a esta locura, y si, diréis que estoy loco o si es que Anne Germain esta a mi lado pero quise creerme que me daba ánimos, esa fue la única vez que he llorado en todos estos meses, ni siquiera en la meta, y esas pocas lágrimas que empañaron mis gafas me daban una fuerza increíble para hacer la natación, no sufrí nada, no me agobie, me sentí cómodo y en mi sitio en todo momento, y al final 1:10, increíble nunca había hecho ese tiempo ni en mis mejores entrenos, va por ti Padre.
Salí del agua junto con Alberto y el destino quiso que un golpe fortuito durante la transición al quitarnos los neoprenos hiciera que mi ojo se hinchara por momentos, joder no veía, no podía ser, la cara de Alberto cambio de golpe, "Joder Jose, lo siento no puede ser, lo siento, lo siento..." en ese momento se que hubiera abandonado la carrera si así mi ojo volviese a su estado normal, nunca le he visto esa cara, esto no podía ser, ese no podía ser el final de nuestra carrera ya que se que si yo no hubiera podido continuar el tampoco lo hubiera hecho nunca.
Le pregunte si sangraba, si estaba rota la ceja y me dijo que no que solo era una bola del hematoma que me estaba cerrando el ojo, así que me apreté el coagulo con todas mis fuerzas y apretando los dientes, la verdad es que ahora que lo pienso me mareo, pero en ese momento solo pensé en repartir el hematoma por el resto del párpado y así poder abrir el ojo. La cara de Alberto cambió y lo mejor es que lo pude ver con los dos ojos, jeje así que no hay mas tiempo que perder que nos quedan 180 km de bici.
La bici bien, buen ritmo, comiendo cada 30 minutos y bebiendo cada 15, como estaba programado, casi toda la carrera turnándome con Daniel, otro español que conocimos en la carrera y que como nosotros venia en una gran expedición de mas de 20 personas entre compañeros y familiares, como anécdotas cuando me pasaban los Alemanes y Daneses con sus bicis con ruedas lenticulares mientras se les oías acercarse con un ruido parecido al de una moto de alta cilindrada, pero tranquilo como dice de compi, ya se bajaran de la bici, ya, que luego hay que correr.
Otro momento fue cuando Daniel en un momento se acerco y me pregunto "ya hemos empezado la segunda vuelta no?" su voz la verdad que no era de mucho entusiasmo, mire el cuenta kilómetros y solo llevábamos 70, madre mía que nos quedan 110, que le digo a este hombre, así que solo se me ocurrió un "Na Daniel si esto esta hecho" no creo que le sirviera de mucha ayuda, a los pocos km deje de verle y hasta la carrera a pie no supe mas de el, pero al verle de nuevo me dio alegría de ver que lo estaba consiguiendo.
Al finalizar la segunda vuelta y a falta de poco menos de 20 km ya entraba de nuevo en Copenhague y el saber que los tuyos estaban esperándote te hace esa parte mucho mas llevadera, así que aprovechar para concienciarte y pensar en recordar como has planificado la marathon. Llego a la transición y ahí están mi madre, mi hermano Jaime y su novia, que la pongo un 10 como cuñada y fotógrafa, con su bandera de España como locos de alegría, miro el Crono y subidon 6:24, menos de 7 horas, me están saliendo las cosas demasiado bien, uff ahora toca correr, supuestamente lo mío, pero 42 km son muchos kilómetros.
Me tomo la transición con calma y empiezo a correr, veo a los míos de nuevo, les pregunto por Pedro nuestro otro compañero de fatigas, ¿esta corriendo?, le digo a mi madre y me responde que si, que va muy bien, ahora si que si, se que mejor o peor vamos a acabar los tres. La historia de Pedro merece un capitulo a parte, y con su permiso le voy a dedicar en este correo unas líneas ya que la admiración que siento por el como por Alberto es infinita.
Pedro, al que me siento orgulloso de llamar mi amigo, es en pocas palabras una maquina en esto del triatlon, como amigo de lo mejor y buena persona como pocas, pues aquí el señor se ha convertido en experto en acabar Ironmans sin entrenar el ultimo mes, la mala suerte por lesiones, cargas laborales etc.. hizo que nuevamente y por segunda vez tuviésemos dudas de que pudiera tomar la salida y por segundo año volvió a conseguirlo y a acabarlo, no se otra cosa que se lo merece, los que le conocen lo saben y los que no habéis tenido la gran suerte todavía os aseguro que si alguien se merece el premio de poder acabar esa carrera y darle la satisfacción a todos los que le queremos ese es Pedro, me quito el sombrero delante de todos vosotros en su honor, Enhorabuena amigo, 11:15, impresionante.
Después de este inciso y siento los que se están durmiendo, pero es mi momento de ser pesado, jeje concluyo mi crónica con la Marathon.
42 km 195 metros, a quien cojones se le ocurrió que después de hacer todo lo que hemos hecho ahora tengamos que correr una marathon entera, que ya de por si es una locura imaginaros la cara que se te queda cuando pasas el km 1 y sabes lo que te queda, esto lo hizo por joder, os lo aseguro, porque esto puede acabar igual de glorioso corriendo un rato para soltar las piernas, así que te enfrentas a un reto dentro de otro reto, como dicen mis maestros en esto del triatlon, el Ironman empieza en el km 10 de la marathon y madre si tienen razón a partir de ahí son palabra mayores y si no has sabido gestionar la bici estas fuera de combate en pocos kilómetros.
Empecé tranquilo, asegurando, con la idea de hacer la ultima parte mas fuerte y con los ánimos de la gente, de mi familia y aquí aprovecho para agradecer al resto de la expedición, Laura, Helen, Carlos, Helga, Miguel, Maria, Teresa y los niños, me llevaron en casi sin darme cuenta hasta el km 20, aquí ya el momento de crisis interna, mis piernas genial mi fuerzas a tope pero mi cabeza empezaba a ir a otro ritmo, llevaba sin ver a los míos varios kilometros, había perdido la cartera la noche anterior con toda la documentación, tarjetas y me empecé a imaginar de todo, cuando digo de todo no exagero, me cruce con Teresa y Helga y les grite mas nervioso que el copiloto de Farruquito, "y mi madre, donde esta? llevo varios km sin verla" , que mala es la mamitis, pobre estaban comiendo algo y buscando mi cartera, así que de repente en el momento mas duro km 29 les veo y me grita, "Hemos encontrado la cartera, tranquilo que ya te queda poco" y tan poco solo 12 km, ahora si que si, corri como nunca me hubiera imaginado, adelantado cadaveres de la mayoría de los Alemanes y Daneses que se las prometían felices cuando me pasaban con la bici, veis? ahora tocaba correr, mi único momento competitivo, pero que momentazo, así que corrí y corrí cada vez mas rápido hasta incluso llegar a bajar de 5 minutos el km, en los últimos tramos, menos de 4 horas no me lo creo, llegan mis 500 metros de gloria y los gozo como nunca, es mi momento y al final del todo veo a mi madre haciendo un quiebro cual Maradona al guarda de seguridad y de la mano recorremos esos metros finales hasta el arco de meta.
ESTO ES POR TI MADRE, POR LUCHADORA, POR SER TAN GRANDE, Ahora toda la gloria que pueda darte acabar esta prueba se la brindo a ella.
